Iom Ierushalaim en Lanus
Anochecía en Buenos Aires, cuando el pasado martes 31 de mayo, emprendíamos un viaje hacia la localidad de Lanús.
Junto a dos Jazaním de nuestro Movimiento, Fernando Szragowicz (Or Jadash) y Álvaro Navarro, nos dirigíamos, convocados por Fedecc y Masorti Amlat, a la Comunidad Ajdut Israel para celebrar Iom Ierushalaim.
La kehilá de Lanús, conjuntamente con otras cuatro de la zona sur del Gran Buenos Aires, recibió alegre y orgullosa, y con gran calidez, a todas las instituciones Masorti que allí se dieron cita para celebrar los cuarenta y cuatro años de la reunificación de Jerusalem.
El acto comenzó con el ingreso de las tres banderas de ceremonias: La de la Argentina, la de Israel y la bonaerense, cuyos portadores se ubicaron en la bimá de la sinagoga, que para la ocasión se encontraba simbólicamente cubierta de pared a pared por una gran bandera de Israel.
Luego de entonarse los himnos correspondientes, se proyectó un video muy emotivo en el que se revivía el momento, en 1967, en que Jerusalem era recuperada.
A continuación la presentación de los jazanim: Natalia Arazi, Álvaro Navarro, Fernando Szragowicz, Silvina Skliar, Diego Rochinas y Caludia Kasirer, quienes interpretaron cada uno de ellos, temas alusivos a Ierushalaim, lo mismo que dos coros de las kehilot de la zona sur del Gran Buenos Aires.
El acto contó con la presencia del Presidente de la Amia, Sr. Guillermo Borguer, de la Daia, Sr. Aldo Donzis, del Sr. Embajador del Estado de Israel, D. Daniel Gazit, del intendente de Lanús, Dr. Darío Díaz Perez, el Presidente de Masorti Amlat, Sr. Daniel Kohn, de Fedecc, Sr. David Drukier y autoridades, representantes y profesionales de kehilot Masorti.
El Embajador de Israel dirigió unas sentidas palabras acerca de lo que significó el momento en poder “volver al Kotel” después de veinte años impedidos de hacerlo, y a su turno, el Intendente de Lanús, en su mensaje, destacó la importancia de Jerusalem para el pueblo judío.
Un muy cálido encuentro que finalizaría con una muestra sobre Jerusalem, la posibilidad de dejar deseos en el Kotel y una muy rica “falafeada”, solo después que todos los jazanim presentes coronaran la noche cantando Ierushalaim shel Zaav junto a todos los asistentes.
Cita Litvak